El triangulo inferior significa la fuerza neutralizante de la vida. Es externa.
El triangulo superior significa la fuerza neutralizante del Trabajo. Es interna.
LA FUERZA NEUTRALIZANTE DEL TRABAJO
Es difícil hallar la Fuerza Neutralizante del Trabajo.
Es inevitable una larga búsqueda para encontrarla.
Toda persona que ha logrado la suficiente convicción de
que el Trabajo es algo real y que conduce a una meta, TIENE QUE EMPRENDER ESA
BÚSQUEDA, SOLA, POR SI MISMA.
No se lo puede comunicar de una manera directa, como
tampoco se puede comunicar el sabor de una manzana a alguien que nunca la
probo.
El largo periodo de búsqueda PARA ENCONTRAR la Fuerza
Neutralizante del Trabajo se inicia cuando uno se da cuenta que no se está
trabajando de una manera correcta.
Esta COMPRENSIÓN es un sentimiento pasajero, un sabor momentáneo.
No es un pensamiento.
Quiero decir que una persona cualquiera puede pensar que
no está trabajando de una manera correcta, en especial la gente que se ha hecho
al habito y al goce de preocuparse por todos y todas las cosas.
Pero estoy hablando de UNA EMOCIÓN, DE UN SABOR INTERIOR,
de UN RÁPIDO DISCERNIMIENTO EMOCIONAL, y no de un pensamiento.
No lo sabe, PERO SIENTE que no hace El Trabajo correctamente.
Observe que no estoy diciendo que usted siente cómo debe
hacer el Trabajo correctamente, sino QUE SIENTE QUE NO LO ESTÁ HACIENDO CORRECTAMENTE
—por el momento—.
NO SE LE DICE LO QUE ES CORRECTO SINO SOLO QUE ALGO ESTÁ MAL.
Esta es la manera del Trabajo una vez que ha empezado a
actuar sobre usted.
No le indica lo que debe hacer, pero suele darle un RÁPIDO
SENTIMIENTO DE DISGUSTO por lo que está haciendo.
Lo detiene —por el momento—.
SE LE DEJA A USTED HALLAR LO QUE DEBERÍA HACER.
Decirle lo que debe hacer se asemejaría a una compulsión,
y sería inútil, porque la compulsión no conduce al desarrollo interior.
Hacer una cosa debido a la compulsión es muy diferente de
hacerla debido a la comprensión.
Es solo mediante la comprensión, que significa VER POR
SÍ por qué una cosa es necesaria, que puede tener lugar el desarrollo
interior.
Y eventualmente, permítanme que lo diga aquí, se tiene
que VER POR SÍ mismo por que El Trabajo es necesario para uno.
Esto nos acerca a una actitud correcta hacia El Trabajo.
Puesto que El Trabajo nos enseña que, mientras la vida
siga siendo la única Fuerza Neutralizante que actúa sobre nosotros, la
Personalidad permanecerá activa y la Esencia pasiva, es necesario buscar otra
Fuerza Neutralizante.
Una Esencia pasiva no puede crecer.
Esto significa que no habrá crecimiento de la Esencia a
medida que nuestra vida prosiga, fuera del crecimiento parcial que tuvo lugar
en los primeros años de la infancia.
En este caso se vive y se muere inacabado — un
experimento en el auto-desarrollo que no pudo completarse—.
Desde luego, si la Vida nos completase, la enseñanza esotérica
no existiría.
Al estar la Esencia cada vez mas rodeada por las capas
pesadas de la Personalidad puede por ultimo separarse completamente de ella.
Entonces una persona esta “muerta”.
La Personalidad la gobierna, y perderá el poder de pensar
por sí misma, entre muchas otras cosas.
Solo otra y diferente Fuerza Neutralizante proveniente
del Esoterismo pueden modificar esta situación y eventualmente invertirla—.
Esa otra y diferente Fuerza Neutralizante en nuestro caso
es El Trabajo Psicológico.
Su origen está fuera de la Vida.
Esto no significa que en cuanto una persona se ponga en
contacto con El Trabajo, tenga lugar ese cambio o esa inversión, como algunos
imaginan.
Muy lejos de ello.
Por muchos años seguirá usando la Fuerza Neutralizante de
la Vida y pensara según la Vida acerca del Trabajo.
No pensara acerca de la Vida segun el Trabajo.
Esta es una de las dificultades.
No puede evitar trabajar segun la Personalidad por mucho
tiempo y así sus esfuerzos provendrán de la parte mala en sí misma, y de MOTIVOS
EQUIVOCADOS.
Sin la fuerza del nuevo pensar según las ideas del
Trabajo, intentara hacer pasiva a la Personalidad por medio de la Personalidad.
Pero al cabo de un tiempo empezara a ver que esto es así
—hasta cierto punto— debido a los BREVES SENTIMIENTOS de que las cosas no andan
bien.
Como dije, es difícil, y exige una prolongada búsqueda
hallar la Fuerza Neutralizante del Trabajo Psicológico —la fuerza que eventualmente
hace que la Personalidad sea pasiva—.
Meditando sobre cómo la Personalidad, con sus prejuicios
adquiridos, sus imitadas actitudes, sus topes y sus reacciones mecánicas, rodea
la Esencia como una alta muralla circular, vemos que es la causa principal de
nuestra prisión.
Se protege a sí misma.
Es activa — esto es, ustedes están a su cargo—.
LA PARTE DE NOSOTROS QUE PUEDE CRECER después que se ha formado
la Personalidad esta ahora encerrada en una casita dentro de esa muralla —a la
que tomamos como nosotros mismos—.
¿No es extraño que hemos de construir esa muralla, ladrillo
tras ladrillo, en la primera parte de nuestra vida, y hacerla tan fuerte como
sea posible Y LUEGO, en la segunda parte de nuestra vida, derribarla, construir
y ampliar la casita con algunos de los ladrillos?
Reforzada por la Falsa Personalidad con sus inagotables
poderes de engaño, la Personalidad, que es esa muralla, puede emprender muy fácilmente
el Trabajo de tal manera que hace creer a una persona que está trabajando segun
la nueva Fuerza Neutralizante del Trabajo.
Mientras que en todo ese tiempo está trabajando segun la
antigua Fuerza Neutralizante de la Vida.
Tal vez desee ser excelente o se piense que está dotada
de misteriosos poderes y cosas semejantes.
Pero sea cual fuere el motivo, si la gente sigue trabajando
segun la Personalidad y así segun motivos pertenecientes a la Fuerza
Neutralizante de la Vida, el Trabajo no puede arraigarse apropiadamente.
SI NUNCA EXPERIMENTAN LOS TRANSITORIOS Y PECULIARES
SENTIMIENTOS DE QUE NO ESTÁN TRABAJANDO CORRECTAMENTE, SE QUEDAN DETENIDOS.
Tal vez no se den cuenta de ello.
NECESITAN UN CHOQUE.
Una de las razones es que no ven verdad alguna en El
Trabajo por sí mismos.
HABLAN DEL TRABAJO DE MEMORIA PERO NO SEGÚN LA PERCEPCION
DE SU VERDAD.
VER LA VERDAD ACTÚA COMO UN CHOQUE —el cual no se dan a sí
mismos—.
Esto se debe a que el orden de Verdad enseñado por El
Trabajo solo puede ser comprendido por LAS DIVISIONES MAS INTERIORES DE LOS
CENTROS y no por las divisiones exteriores donde mora la mente sensual.
El Trabajo no es una verdad sensual.
El suelo de la mente sensual no es conveniente para que
puedan crecer en él las semillas del Trabajo.
Puede recordar la enseñanza del Trabajo pero no
comprenderla.
Ahora bien, si una persona nunca ve por sí misma y
entiende la verdad de una sola de LAS IDEAS enseñadas por El Trabajo, NO TIENE PUNTO ALGUNO en el Trabajo, tal como suele decirse.
Dentro de ella todo se desplaza como la arena en el
desierto.
Nada hay de lo cual aferrarse.
No tener punto alguno en el Trabajo, aun después de años
de contacto, Y NO HACER INTENTO DETERMINADO ALGUNO PARA HALLARLO, sino seguir escuchando
las propias objeciones y escepticismo es un orden de cosas del cual no se puede
esperar que ATRAIGA la Fuerza Neutralizante del Trabajo.
Esta actitud está muy equivocada.
Así la Personalidad seguirá siendo dominante y dicha persona,
como experimento de auto-desarrollo, será un fracaso.
Nuevamente —fingir tener un punto en El Trabajo no hará
cosa alguna para aflojar el poder de la Personalidad—.
Las verdades de este Trabajo pueden liberarnos de la Personalidad,
pero no si fingimos verlas y valorarlas, y en secreto no lo hacemos.
Maurice Nicoll
No hay comentarios:
Publicar un comentario